En el sentido estrictamente comercial, el Cormorán guanay es, sin lugar a duda, el ave silvestre más valiosa del mundo, pues el guano que produce y deposita en las islas áridas de la costa peruana, ha representado para ese país una entrada de muchos millones al año. Con razón ha sido llamada el «Ave del billón de dólares»

Ave típica de las aguas de la corriente Humboldt, y con el epicentro de su zona de distribución en las islas adyacentes al Perú central, en las cuales anida por millones, emigra al final de la estación de crianza hacia el Sur y en menor escala hacia el Norte, pero siempre procurando mantenerse dentro de la zona de influencia de esta corriente, de cuya superabundancia de peces depende por completo para su sostén y su vida. Tanto es así que cuando, por causas no bien establecidas o investigadas aún, esta corriente se desvía de su zona de influencia normal, tal desviación representa para el Guanay un desastre de proporciones incalculables y los Guanayes mueren de hambre por millones.

En las épocas de migración anual, que empiezan en marzo o abril y terminan en noviembre o diciembre, el Guanay se ve por nuestras costas en enorme número, especialmente cuando entra a las bahías o caletas en seguimiento de cardúmenes de anchovetas.

Su vuelo característico de largas hileras en formación de “V” los identifica desde lejos.

Esta valiosa ave anida en las islas guaneras del Perú, desde Lobos de Tierra al Sur. Prefiere siempre superficies planas expuestas al viento y allí anida por millares, si no por millones.

Aunque es dable encontrar nidos con huevos o pichones en cualquier época del año, la temporada principal se concentra en los meses de octubre a diciembre. La nidada normal es de tres huevos, pero a menudo ponen sólo dos; son blancos, calcáreos imposibles de distinguir de huevos de otras especies de Cormoranes.

Algunas colonias aisladas anidan en islotes cercanos a la Isla Mocha y en islotes de Pupuya (6ta región). Imágenes San Antonio, Agosto 2021.